martes, 10 de abril de 2007

POSICIONES VIII

EL ABANDONO

La mujer tumbada sobre un cojín en el suelo, con las rodillas dobladas. El hombre se introduce entre los muslos de ella y levanta su pelvis para penetrarla. Volcado hacia delante para alcanzar con la boca el vientre de su pareja, dirige los movimientos, mientras la mujer se abandona.


SUMISIÓN

La mujer se apoya sobre sus brazos, apoyada sobre el vientre con una pierna plegada. El hombre, sobre ella, se apoya sobre sus brazos en tensión. Él la penetra efectuando un movimiento de vaivén que acentúa el grado de placer.



LA TUMBONA

El hombre se echa hacia atrás apoyándose sobre las manos. La mujer se sitúa cómodamente sobre almohadones, con las piernas apoyadas sobre los hombros de él. la mujer efectúa un movimiento de vaivén. En esta posición, la penetración es profunda y provoca sensaciones de placer intenso.


SIRENA VOLADORA

El hombre se sienta en una silla. Ella se monta a horcajadas echando su cuerpo hacia atrás, con la cabeza reposando sobre un almohadón. El hombre la penetra haciendo un movimiento de vaivén y acariciándole los senos. Esta posición es bastante acrobática y exige una cierta agilidad.


LA CASCADA

El hombre se encuentra tumbado sobre la espalda. Ella se tumba, también de espaldas, sobre él apoyándose en los codos, con las piernas dobladas y sus pies sobre las rodillas de él. El hombre la penetra animándola a un movimiento de vaivén y sujetándola por la cintura. Esta posición puede ser una fase intermedia que continúa al darse la mujer la vuelta.


EL DELFIN llamado también EL ARCO

La mujer se encuentra tumbada en la cama, apoyándose sobre la cabeza y hombros. De rodillas, el hombre se pone a horcajadas, manteniendo la pelvis de la mujer a la altura de su sexo y guiando el movimiento de vaivén. Se trata de una posición deportiva que conduce a una excitación rápida. Sin embargo, no se puede mantener durante un largo espacio de tiempo. Puede ser una postura introductoria para a continuación pasar a otra más confortable en la que el hombre, apoyándose en sus pantorrillas, acerca hacia sí la pelvis de su pareja acariciándole el clítoris.


CABALGATA HACIA ATRAS

El hombre tumbado sobre su espalda, la mujer, sentada a horcajadas sobre él, dándole la espalda y con las rodillas apoyadas en el suelo, efectúa movimientos de vaivén. Ella al mismo tiempo puede acariciar el sexo de su pareja o su clítoris con los dedos mojados en saliva o en secreción vaginal.


FLOR DE LOTO

El hombre está sentado con la piernas cruzadas en la cama y la mujer se sienta sobre él a horcajadas. Él dirige el movimiento con sus manos, besando los senos de su pareja.


EL CARTERO

La mujer está tumbada sobre la espalda, las nalgas en el borde de la cama. El hombre se encuentra arrodillado en el suelo sobre unos almohadones o de pie y la penetra acariciándole los senos y el clítoris. Esta posición puede hacerse también sin el movimiento de vaivén, la mujer atrae hacia ella a su pareja, envolviéndole con sus piernas entrelazadas. Posición muy excitante: ella siente las pulsaciones del pelvis y él las contracciones de la vagina.


AMAZONA

El hombre se encuentra cómodamente sentado sobre una silla. La mujer se monta a horcajadas sobre él. Mientras que ella hace movimientos de vaivén, él le mordisquea los senos y guía los movimientos con sus manos. Esta posición es original y estimulante.



ENCAJE

El hombre y la mujer se encuentran tumbados de lado (la mujer dando la espalda al hombre). La mujer encaja bien su pelvis en la del hombre, quien coge con sus piernas las de la mujer. El hombre acaricia el clítoris de la mujer durante el acto. Antes de llegar a la penetración, la mujer puede acariciar el sexo de su pareja contra el suyo. Esta posición es cómoda y resulta también bastante estimulante si se acompaña de caricias.


LA ESTRELLA

La mujer se encuentra tumbada, sobre la espalda, con una pierna estirada y la otra doblada. El hombre se monta a horcajadas sobre ella, pasando una pierna por debajo de su pierna doblada y echando uno de los brazos hacia atrás, para apoyarse. Esta posición puede resultar un poco cansada, aunque es muy estimulante, ya que la mujer puede acariciar el cuerpo del hombre o su propio cuerpo durante el acto.

EL DEPARTAMENTO - CUENTO EROTICO (7ma parte)



“Hoy, 21 abril de 2001 comienzo a tener terribles pesadillas desde que empecé a observar con ese telescopio que encontré en el departamento.
Ya no como bien, no duermo, falto a mi empleo, no puedo ni siquiera acercarme al balcón porque me obsesiona la idea de ver como cada noche el sodomiza a dos o tres mujeres a la vez, y quisiera que el lo hiciera conmigo también. Ese cuerpo tan bien formado, sus abdominales, sus nalgas que quisiera penetrar con mi miembro y desgarrarlo ahí dentro suyo, esa piel me deslumbra, estoy extasiado viéndolo, me estoy volviendo loco, y no puedo dejar de mirarle cada noche.”


Al leer todo esto no entendía nada, hablaba de un hombre , quizás aquel de piel negra que yo vi unas noches, pero no me cabía duda que el dueño del cuaderno era un hombre, o sea el anterior inquilino de mi departamento, y por consiguiente por lo que decía el no era el dueño del telescopio, sino que lo encontró aquí. Pero no hablaba para nada de ella.
Seguí leyendo otros fragmentos de las notas:

“Hoy lo vi vestido de cueros, tenia un antifaz en su rostro, y un pequeño látigo en la mano, hoy sus enviciadas victimas eran dos jovencitas, no tenían ni 15 años, casi sin pechos, solo insinuaciones de lo que traería el tiempo, una atada de las muñecas a una silla, la otra con una cadena en su cuello, y una venda en los ojos, sometía a su amiga, se abalanzaba contra ella mientras el, le propinaba latigazos en su espalda, ellas disfrutaban. Las vi besarse descarriadamente, el reía de placer, mientras se masturbaba con su otra mano, para acercar su pene erguido y duro a la boca de las niñas, que se debatían por chupar el néctar que fluía de el, después las arrastro por el piso para cambiarlas de pose, y comenzo a penetrar a una por el ano, mientras que a la otra le chupaba los pequeños senos y se los manoseaba groseramente.


No pude seguir leyendo, me sentía mal, el no veía lo mismo que yo, acaso seria otro departamento?

Mas adelante, pude leer:


(continuara)
CIELO INMENSO



POSICIONES VII


PIES EN LA TIERRA

Los dos de pie, la mujer dando la espalda al hombre. Las manos enlazadas, el hombre tira hacia si para penetrarla por detrás. La mujer puede apoyarse contra la pared o una mesa para mantener más fácilmente el equilibrio.



EL CANDELABRO

La mujer está tumbada sobre la espalda, con una almohada bajo la cabeza, la pelvis elevada sobre un almohadón situado al borde de la cama. El hombre se encuentra arrodillado en la cama. Ella eleva sus nalgas ofreciéndose así al hombre que la penetra acariciándole las nalgas, zona muy erógena.



APERITIVO SABROSON

El hombre está sentado en el suelo o en la cama, con una pierna estirada y la otra ligeramente doblada para mantener el equilibrio. La mujer se monta a horcajadas, apoyándose en su pareja. El hombre la mantiene fuertemente por la espalda para asegurar una penetración profunda. Ella adapta el movimiento para procurar un mayor placer. En esta posición puede estimular los senos mediante besos y mordisqueos.



EL CLIP

El hombre se tumba de espaldas con las piernas juntas. La mujer se coloca sobre él a horcajadas, apoyándose sobre los brazos, con el busto hacia atrás. Durante el acto, la mujer es la que lleva el ritmo y el hombre puede acariciarle el sexo, estimulando el clítoris. Esta posición es bastante simple y procura un verdadero placer a los dos amantes.



CONFIDENCIAS

El hombre se coloca entre las piernas de su pareja. Ella se tumba de costado, con las rodillas dobladas, los pies cruzados entrelazándole con sus piernas. Durante el acto, ella puede acariciarle el sexo y la nuca. Los amantes pueden disfrutar con esta posición íntima y tierna para decirse todo lo que desean descubrir juntos.



EL DESAFIO

¿Estáis preparados para el desafío? Necesitáis una silla, mucha agilidad y una gran forma física. La mujer pone los pies sobre la silla, con el torso doblado y los codos apoyados en las rodillas. El hombre la mantiene como si estuviera sentada, sujetándola por la cintura. El hombre es el que lleva el movimiento de vaivén para alcanzar una mayor excitación.



EL DOMINIO

El hombre y la mujer se ponen de rodillas uno frente al otro. El hombre coloca sus pantorrillas entre las de la mujer y se pone a horcajadas. Esta posición intimista permite a los amantes abrazarse, entrelazarse y acariciarse.


LA CARRETILLA 2

La mujer se apoya de costado sobre los antebrazos y sobre las rodillas. El hombre de rodillas, coge a su pareja por la pelvis y se pone a horcajadas, llevando el movimiento. Esta posición es una posición de transición, puesto que resulta agotadora para ella.




LA TARANTULA

El hombre se apoya sobre las manos con las piernas estiradas. La mujer se pone a horcajadas, apoyándose con las manos y piernas. Su pelvis puede oscilar libremente y controlar el movimiento.