miércoles, 25 de abril de 2007

EL TELEFONO Y LA DISTANCIA



Cuando sono el telefono un presagio me decia que eras vos, la charla comenzo en trivialidades derivando en:
- te extraño
-pronto regreso
-te necesito
- te quiero aca conmigo
Y tu voz en el telefono me hizo revivir nuestras noches de pasion, tus manos de artista creando su mejor obra; tallando, esculpiendo, moldeando cada centimetro de mi cuerpo.
Ahí entre tus palabras amorosas y el revivir de pensamientos húmedos, comencé a tocar mi cuerpo, ansiando que mis manos fueran las tuyas, ansiando tenerte aqui y ahora. Deseando tus labios, tibios y ardientes al mismo tiempo.
Solo ellos sabian elevar la temperatura de mi cuerpo, y hacer vibrar cada partícula de mi ser como tocando el alma.
- te quiero acá, volvi a decirte
- estoy tan excitada, agregue después
Y vos solo callaste unos segundos, para agregar:
- vida yo tambien te deseo, me excito con tu imagen en mi mesa de luz, con tus recuerdos, con todo lo que vivimos juntos.
Y se produjo un silencio de palabras, el aire se lleno de suspiros, de gemidos, de espasmos arrebatados de dolor mas que de placer.
Porque bien sabiamos de la distancia que teniamos en esos momentos separandonos, porque conociamos demasiado bien nuestros puntos vulnerables y que despues de deambular por la vida buscandonos, al fin nos hallamos, mas allá del sexo y el placer, mas alla en comunion con nuestras almas.
CIELO INMENSO

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